Ahora, en octubre pasado, el tribunal admitió a Inmobiliaria Mirador Punta Pite Spa como tercero coadyuvante del SEA, por lo que el caso está en curso y continúa siendo objeto de debate y controversia. La inmobiliaria por su parte, argumenta que las gestiones, actos y obras para el proyecto han sido sistemáticas, permanentes e ininterrumpidas. Aseguran que la resolución impugnada fue dictada conforme a la normativa vigente.
El gerente de Mirador Punta Pite, Francisco León, declaró en 2019 al diario La Segunda que al menos tres de los cortes en el cerro fueron realizados por los actuales dueños para construcción de vías interiores, redes de agua potable y alcantarillado. A pesar de la defensa presentada, en ese entonces la SMA solicitó sanciones a la constructora e inmobiliaria por la tala no autorizada de arbustos y árboles nativos.
El bosque esclerófilo, ecosistema único y vulnerable, ha sufrido una significativa disminución debido a factores como la expansión agrícola, la urbanización y los incendios. Este entorno se encuentra bajo la presión del cambio climático, manifestado en una prolongada sequía que ha afectado a la región por más de una década. La escasez de precipitaciones y el aumento de las temperaturas han causado estragos, evidenciados por el declive y pardeamiento de hasta el 30% de los bosques chilenos.
La problemática no solo impacta la flora y fauna, sino también la calidad de vida de las comunidades. En zonas urbanas cercanas a estos ecosistemas, como Santiago, la deforestación puede incidir en la calidad del aire y del agua, a la par que aumenta el riesgo de fenómenos naturales adversos, como inundaciones y deslizamientos de tierra.